Sé que no escribo desde hace 4 meses, lo cual es una total dejadez de mi parte, sobre todo con ustedes que sé que ingresan al blog para ver si al fin me digné a escribir alguna línea. Pero de veras tengo una explicación muy buena y es que en agosto tuve que cambiar de residencia por motivos de trabajo, para las que no lo sabían yo soy de Lima y he vivido ahí toda mi vida, pero ahora por cosas del destino me trasladé al interior a una provincia de la sierra del Perú por motivos de trabajo, y no me quejo me está yendo super bien, pero como comprenderán mi tiempo se redujo tanto y sobre todo ya no tenía la facilidad de tener el computador a mi disposición porque todas estas páginas estaban bloqueadas en mi pc, así es que estoy de vuelta por motivos de fiestas y aprovecho para contarles un poco lo sucedido en estos últimos meses.
En primer lugar empiezo por contarles que lo primero que pensé cuando me salió este trabajo fue en mi querida Lucía, obviamente nunca se me pasó por la cabeza dejarla sola a merced de todas esas mujeres que la rondan en Lima cada vez que vamos a una discoteca. No se los voy a negar, Lucía es joven, linda y baila muy bien, más de una mujer mataría por robarle un beso, tal vez sus amigas lean esto o la misma Lucía lo lea y se ría y piense que soy una exagerada, que mis ojos enamorados la ven más linda de lo que es en realidad, pero yo me resisto a creerlo, ella es linda y muchas veces hemos peleado por mis celos desmedidos o porque alguna de sus amigas hizo una broma que me reventó el hígado... jejeje... si soy celosa y no me culpen por eso.
Le propuse a Lucía irse conmigo y ella no lo pensó 2 veces, dejó sus estudios y se vino conmigo a esta provincia que no tenía nada que ofrecerle, vino sólo para estar a mi lado, por amor, por cuidarme, y supongo porque tenía el mismo miedo de perderme, de que este amor que encontramos sin querer se quede a medias y volvamos a esa soledad que es tan difícil de sobrellevar y a esa incertidumbre de pensar si esa persona que nos mira, que nos habla, que nos invita a salir, que nos baila bonito sea en verdad tan buena como nosotras creemos.
Tanto ustedes como yo sabemos lo duro que es este ambiente, lo difícil que es relacionarse, encontrar no solo una pareja si no también una amiga, una mujer de buenos sentimientos, que no solo quiera divertirse, pasar el rato o experimentar, una persona sincera y sobre todo segura de lo que quiere. En este año yo pude salir del closet, no del todo porque aún mi familia no lo sabe, pero a algunos amigos y amigas cercanas ya se los dije y lo tomaron de la mejor manera, ninguno me insulto ni me hizo a un lado, y no saben lo bien que se siente, el ser uno mismo, el no engañar ni ocultar a la persona que amas. Me gustaría cruzar esa barrera tan difícil que es la de decirle a tu familia quien eres, a Lucía le encantaría que lo haga, muchas veces hemos discutido por ese tema, pero no creo estar preparada aún para afrontar ese rechazo.
He logrado muchas cosas, me siento feliz, siento que he crecido mucho, he asumido mi sexualidad y he podido disfrutar del verdadero amor, de lo que en realidad deseaba, despertar al lado de una mujer, dormir al lado de una mujer, la convivencia no es nada fácil, no crean que todo es color de rosa y que es como en The L World que si no te va bien con tu novia te vas con otra y se acabó el problema, al menos entre Lucía y yo las cosas no son así y tampoco quiero que sean así, para mí el compromiso que asumí al vivir con ella es algo que debemos respetar y pelear por conservar hasta que si en algún momento nuestro amor se acaba seamos tan valientes de decírnoslo en la cara. El amor es complicado, es lindo al comienzo, pero es más lindo cuando a pesar de los problemas, esas dos personas que comparten una vida se compenetran tanto como para comprenderse y apoyarse mutuamente dejando de lado las intrigas, los celos y sobre todo las inseguridades que definitivamente nunca van a faltar sobre todo porque aún no hemos salido del clóset y aún debemos fingir una vida heterosexual con las personas que nos rodean.
Desde aquí quisiera decirles a todas esas parejas que conviven mucho tiempo que las admiro, que no es nada fácil, pero que es importante el compromiso y sobre todo el respeto. A las parejas que aún no viven juntas solo les daría un consejo, piénsenlo bien y estén muy seguras del paso que van a dar porque el amor debe ser muy fuerte y muy sólido. Si de verdad están enamoradas, entréguense a esa persona, respétenla, cuídenla y no la dejen ir, el amor se construye día a día, las peleas frecuentes pueden dañar mucho los sentimientos, conversen mucho y siempre estén dispuestas a escuchar y a entender a su pareja, sólo asi podrán encontrar el verdadero sentido a compartir su vida con la persona que aman.
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